- Tapijulapa -

Como muchos pueblos tabasqueños, Tapijulapa está enmarcado por majestuosos ríos. Los de aquí son el Oxolotán, de aguas sulfurosas, y el Amatán, de corriente cristalina buena parte del año. Además, este acogedor caserío de tres mil habitantes, está acunado por cerros cubiertos de ceibas, amates, matapalos, chicozapotes y otros grandes árboles que forman uno de los rincones mejor conservados de la selva alta en el estado. Para conocer la “Esmeralda de la Sierra” fue que emprendimos este viaje.
Caminar por el pueblo, desde la Iglesia de Santiago Apóstol hasta el puente sobre el río Amatán.
Saborear los platillos de Tapijulapa: el mone, el chote, el totoposte preparado y los tamales.
Visitar Villa Luz, conocer la mansión de Tomás Garrido Canabal, y disfrutar los arroyos y las cascadas de aguas sulfurosas.
Gozar el río Amatán, sea en un paseo en lancha, en la tirolesa o dándose un chapuzón.
La Pesca de la Sardina Ciega en la cueva de Villa Luz el Domingo de Ramos.
Las procesiones de Semana Santa y la celebración del Santo Sepulcro en Oxolotán.

La Feria de Tapijulapa del 22 al 25 de julio.